“Es fácil mostrarse valiente tras las murallas de un castillo.”
Proverbio galés
Los lugares donde ir de trampa es una cuestión para otro momento. Aquí veremos donde conseguimos nuestra amante. Donde no hacerlo o que ventajas y desventajas tiene cada lugar.
El trabajo: El ámbito laboral es peligroso para tener fatos o buscar amantes. No se recomienda, ya que además de tener problemas con tu pareja, puede que te perjudique en tu trabajo y eso puede ser un problema por partida doble. Si sos el jefe, no existiría uno de esos problemas. Pero también puede suceder que una amante despechada, no solo te delate con tu pareja sino que te haga una denuncia por acoso. El trabajo es un lugar riesgoso para eso, lo mejor es mantenerlo todo en secreto, fuera del sitio de trabajo. Debes tomar en cuenta si vale la pena el riesgo, sobre todo si existen lazos entre tu grupo de trabajo y tu pareja. Algún envidioso que te delate, una compañera que empatiza con tu pareja, etc. Un tema aparte sería la oficina como lugar de trabajo.
La oficina: Este es un lugar especial, ya que en las oficinas, donde específicamente trabaja mucha gente, pero mucha; se dan otras dinámicas. Si es un edificio y conocés gente de otros sectores, puede haber más facilidad para pasar desapercibido. Pero como antes, se recomienda siempre hacer algo fuera del lugar de trabajo, no dentro. Entre tanta gente podés camuflarte mejor, disimular tus actividades, pero si la noticia sale a la luz, sos un filete frito. Es más, aunque no te delaten, puede que te conviertas en el chisme de la empresa. Lo cual es una sentencia a largo plazo a que lo sepa tu pareja. Para cuando se entere, lo habrá sabido todo el mundo antes que ella, lo cual la hace peor cornuda. Lo peor de los cuernos no es la traición en si, sino la vergüenza de que se entere todo el mundo, recordemos.
El barrio: Tener una amante en el mismo barrio, sea de algún negocio de la zona, vecina o lo que fuera; es jugar con fosforos y nafta. Es peligrosísimo. Más que en el anterior. Un vecino chismoso que te ve, de esos abundan. Tu propia pareja te puede ver entrando a la casa de una vecina. Querer hacer eso, por más buena que esté la vecina es tener tendencias suicidas.
Círculos en común: Ya explicamos en otro capítulo el tema de las amigas de tu pareja que te tiran onda, o tener amigas de amantes; eso ya se trató. Aquí hablamos de los conocidos, allegados, amigos de amigos; un lazo no tan estrecho. Los círculos que compartís con tu pareja, es el ámbito más prohibido de todos. Ni hablemos de las amigas, eso ya lo vimos. Planteamos aquí otra cuestión, una mera conocida, la amiga de una conocida, los pasos de intermediación pueden ser fatales.
Círculos propios pero conocidos: En tus círculos de conocidos, existe el riesgo que al saber que estás en pareja, le importe poco que la cornuda no se entere. Total, el problema lo tendrás vos. O ya era su intención el hacerlo, puede haber muchas motivaciones para eso. Es riesgoso si esto es posible. También puede que sea más seguro si se dan las posibilidades opuestas. Que tus conocidas o amigas, tengan inquina contra tu pareja y disfruten con hacerla cornuda. El problema reside en si es por venganza o desinterés. Si la cuestión es por revancha, puede que solo lo vean completa, logrando que se entere tu pareja de los cuernos que tiene. Si a tu amante le resulta indiferente, volvemos al caso de la amante discreta, una de las mejore posibilidades que tenemos de trampa. A la vez, cabe la posibilidad, que la amante deje ser discreta porque de tanto cornear a tu pareja con ella, le entra una complejo de culpa o un ataque de conciencia. Cada hombre sabrá si hay mucho riesgo en estas chances, dependiendo de las personas de su círculo. Y los amigos o conocidos propios que sepan de tus aventuras, es otro riesgo a evaluar. Eso ya fue tratado en capítulos anteriores.
Lugar de estudio: Sea el colegio, en muy jóvenes. Sea en la facultad, ya más grandes. O sea en un curso de inglés, gimnasia o lo que sea; existe un riesgo dividido como en el ejemplo anterior. Mejor si tu pareja no conoce a esa gente, no es necesario y evita celos innecesarios. Sobre todo si en el lugar que vas a tomar clases, hay muchas mujeres potables. Aun cuando no te interesaran, lo más probable es que ninguna te preste atención. Pero aun así, podrías tener que soportar escenitas de tóxica. Y ni hablemos si a alguna mirás con buenos ojos. O peor aun, que alguna te da cierta cabida. Cuidado, lo mejor es mantener a la pareja en la ignorancia. Lo que no sepa, no la preocupará. Puede que tema que haya mujeres muy potras donde vas, pero que lo confirme in situ, es una solicitud al desastre.
Actividades recreacionales: Tenemos aquí el gimnasio, artes marciales, algún tipo de hobby, talleres de alguna clase; una larga miscelánea. En este lugar, es casi como el ejemplo anterior. Lo recomendable es nunca juntar a tu pareja con este grupo. Puede que veas una amante potable, por lo que deberías guardarte el secreto de que estás en pareja. Puede que no tengas a nadie en vista, pero en el futuro no se sabe. Evitate los celos. El problema con una celosa es que se mantiene alerta, si está celosa por la potra que va al gimnasio con vos, aunque está no te da ni la hora; tu pareja se mantiene alerta por si hay otra. Lo cual te dificultaría que tengas una amante en otro ambiente. Por sospechar y alucinar de una mujer que nada que ver, termina descubriendo la que si es realmente un fato.
Mantenerla en la ignorancia, no hacerla participe de ese círculo, o mostrar como que tenés poco contacto con la gente de ese ámbito; te va a dar la libertad de operar para lograr alguna aventura. Siempre, eso si, se debe evaluar el riesgo de cada caso particular propio.
Fantasías pervertidas de ayer y hoy presentó...
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